

Buses Urbanos: Denominados como micros, a partir del año 2007, se inauguró un sistema de transporte urbano llamado “Transantiago” con buses troncales (de color blanco y verde) y buses alimentadores (de diversos colores que comunican con la periferia de la ciudad). Sin embargo, existen buses interurbanos (que llegan desde Santiago de manera directa hacia los puntos más importantes del país) y buses regionales (de tamaño más pequeño que efectúan traslados dentro de una región y a destinos remotos). Las principales terminales de buses en Santiago son: Terminal Alameda, Terminal Santiago, Terminal Los Héroes y Terminal San Borja.
Metro: Es uno de los medios más rápidos, limpio y seguro. Actualmente, la red dispone de 5 líneas y constantemente está creciendo.
Taxis: Los autos negros con techo amarillo recogen pasajeros en cualquier punto. En el caso de Santiago, la tarifa base es de 250 pesos (0,52 USD) y alrededor de 100 pesos por cada 200 metros de distancia. Si vais a hacer un recorrido extenso, es aconsejable acordar el precio previamente a subirse al taxi. Asimismo, no es costumbre dar propina a los choferes.
Colectivos: Poseen rutas predefinidas que podéis visualizar sobre el techo del vehículo. Durante horas de la noche, a cambio de un cobro adicional, pueden llevarlos hasta una dirección específica, siempre que esté cercana a la ruta estipulada.
Trenes: Únicamente quedan trenes que van hacia el Sur desde Santiago a Chillán y disponen de mayores servicios que los buses como bar y restaurante.
Vuelos nacionales: A causa de las grandes distancias, volar es una posible alternativa dentro de Chile. Hoy en día solo hay 2 líneas privadas: LanExpress y Sky Airline y ofrecen servicios hacia las ciudades más importantes del país.
Alquiler de vehículos: Para alquilar un automóvil, debéis ser mayor de 21 años, presentar licencia para conducir vigente y dejar un boucher de vuestra tarjeta de crédito como garantía.
Foto: juanpol